domingo, 30 de enero de 2011

CAPÍTULO 2: 10 MANDAMIENTOS

Desencajado. Sorprendido. Aniquilado. Después de visitar a su padre, aquellas sensaciones eran las únicas que podían describir su estado de ánimo. Lars todavía era incapaz de encajar semejantes palabras. Como una daga ardiendo introduciéndose en su estómago. Lentamente, y sin anestesia. 

Lo más curioso era que aquello sólo representaba la guinda que coronaba una semana desastrosa: La escuela había cerrado por manifestaciones, por lo que no pudo terminar el proyecto que debía entregar el viernes. Éste trabajo, además, había sufrido muchos cortes desde que Lars planteara la idea y presentara el primer borrador. Estaba harto de que profesores y jefes de departamento se dejaran guiar por los absurdos cánones de la industria americana, y, sobre todo, que tratasen de inculcárselos a él y al resto de sus compañeros.

Llevaba mucho tiempo meditando sobre aquello, pero la dolorosa declaración de su padre, le instó a tomar medidas. Sabía que contaría con la aprobación de Thomas, quien compartía su animadversión hacia los productos prefabricados, con sello "Made in USA". 

¿Acaso era tan terrible contar historias de verdad, sin artificios, ni efectos que dañaran al propio argumento? Su pretensión no era destruir el modelo, sino centrarse en el aspecto más humano, que invitara a la reflexión y no al entretenimiento. 

Tras varios planteamientos y estudios, Thomas y él terminaron de redactar el manifiesto, que supondría una nueva mirada y enfoque, y  que cambiaría, de algún modo, la historia del cine (o al menos, de cómo hacer el suyo):




MANIFIESTO DOGMA ´95 – PROMESA DE CASTIDAD
1.     Los rodajes tienen que llevarse a cabo en locación. No se puede decorar ni crear un "set". Si un artículo u objeto es necesario para el desarrollo de la historia, se debe buscar una locación donde estén los objetos necesarios.
2.     El sonido no puede ser mezclado separadamente de las imágenes o viceversa (la música no debe ser usada, a menos que esta sea grabada en el mismo lugar donde la escena está siendo rodada).
3.     La cámara debe ser manipulada con las manos o apoyada en los hombros (la película no será rodada donde está la cámara; el rodaje debe ser realizado donde esté la película).
4.     La película tiene que ser en colores. Luz especial o artificial no está permitida (si la luz no alcanza para rodar una determinada escena, esta debe ser eliminada o, en rigor, se le puede enchufar un foco simple a la cámara).
5.     Usar efectos especiales o filtros de cualquier tipo está prohibido.
6.     La película no puede tener una acción o desarrollo superficial (no puede haber armas ni pueden ocurrir crímenes en la historia).
7.     Las alteraciones de tiempo y/o espacio están prohibidas (esto es para decir que la película toma lugar aquí y ahora).
8.     Películas de "género" (genderfilm) no están aceptadas.
9.     El formato debe ser 35 mm normal (academy format)
10.  El director no debe aparecer en los créditos

viernes, 21 de enero de 2011

CAPÍTULO 1: PESADILLA

Junio. 1980. Aquel día el sol prefirió no molestar y, por tantom no se apreció atisbo alguno de calor. Lars acababa de levantarse, aunque sus pensamientos le habían mantenido en vilo toda la noche. No podía pensar en otra cosa que no fuera la imagen, aquella que no hacía más que repetirse en sus sueños. La mujer agazapada, acechando entre tinieblas, esperando el momento para atacar. ¿Qué pretendía mostrarle su mente con esa pesadilla? ¿Por qué el mal se encarnaba en la feminidad? Demasiadas preguntas se acumulaban, pero ninguna contestación daba la respuesta.

De repente, algo en su interior se iluminó. No sabría explicar qué sacudió su mente, pero le había dado una gran idea. Hizo dibujos, esquemas, llenó folios de reflexiones que no llegaban a ninguna parte. No era suficiente, necesitaba transmitirlo de otra forma. De modo que, sin pensarlo, se dirigió hacia el armario de su habitación (el azul situado delante de los pies de su cama) en busca de su cámara. Tras hablar con Thomas, ambos se dispusieron a darle vida a aquel delirio, a través de una historia plasmada en imágenes y secuencias aterradoras.

Lars decidió partir de su sueño, de aquella silueta en penumbra que habitaba en su mente. Acompañada con una escalofriante banda sonora (similar a la de muchos filmes de Hitchcock), la escena lograría perturbar al espectador de la misma forma que a él: Conforme avanzan los minutos, la oscuridad desaparece, y una ventana parece situarse junto a la muchacha. La música se vuelve más estridente, hasta que una figura irreconocible a través del cristal, destroza el mirador, con intención de atacar.

Este comienzo, al igual que la realidad de Lars, no es más que una pesadilla. Un sueño escalofriante que hace padecer a su protagonista una especie de fotofobia, envenenada por la oscuridad, que no le permite salir a luz.La joven empieza a sentirse cada más insegura. Se agarra a las sábanas, intenta calmarse hablándole por teléfono a una voz, aparentemente, desconocida. Pero nada consigue tranquilizarla. El primerísimo primer plano de su ojo derramando una lágrima logra transmitir esa inquietud. Este miedo, sin embargo, no es más que una metáfora, un reflejo del verdadero temor que esconde Lars, y que se desvela al final. 

A través de varios planos, en los que se muestran bombillas rojas y flores marchitas, se va mostrando qué ocurre realmente. Pero la llamada de teléfono es la encargada de dar la explicación a esta extraña fantasía, pues la protagonista descubre que su verdadero pánico no debe achacarlo a las sombras, sino a volar. La  secuencia final , con un cielo sepia y una gran bandada de adorno (que recuerda a "Los pájaros"), cierra de forma magistral este corto, con el que su creador consiguió su objetivo: confundir y desasosegar.


A pesar de todo, Lars seguía sin conciliar el sueño. Pero, esta vez, eran otro sueños los responsables de no dejarle descansar. Situaciones inconexas que, de momento, no conseguía explicar. De momento.

PRÓLOGO: EL HOMBRE

Esta es la triste historia de VonTrierville, el lugar donde nacieron algunas de las más brillantes ideas de la historia del séptimo arte.


VonTrierville es un pequeño universo dividido en varios rincones, donde se guardan las distintas inquietudes de su habitante, cada una con un tema y nombre asignado.  A lo largo de los meses, se irán descubriendo nuevos detalles acerca de él, sus pensamientos y su relación con este extraño espacio.
Nuestro protagonista, Lars, es un hombre de mediana edad, estatura normal, y una mente perturbada, a la par que prodigiosa. Diferente, atrevido o polémico son sólo algunos de los calificativos que se pueden utilizar para intentar definir la personalidad de este ser infrahumano, dotado con la extraña habilidad de lograr que cada una de sus obras permanezca en la memoria de aquel que las visiona. Para bien o para mal. También de remover entrañas, agarrar corazones y pisotearlos, sin remordimiento alguno. En definitiva, destrozar el alma de sus espectadores, para que puedan reconstruirla a través de sus mensajes nada subliminales.
Pero basta de palabrería insulsa. Que comience la locura.